Tras 4 días constantes de intensa fiesta y maltrato al cuerpo, visitando la Rumanía urbana y rural despertamos, como cada día a eso de las 10 y media, rozando el límite para la hora del desayuno, con moderada resaca.
Nos encontrábamos perdidos, indefensos y muy desconcertados, sin saber que hacer.
Marc quería hacer cosas culturales pero Javi y yo no somos de ese estilo, Dimitri quería matarse, y de hecho, lo intentó en el metro. Suerte que siempre nos tiene cerca.
Después de debatir mucho, insultarnos y ponernos nerviosos elegimos la opción más racional. Eliminar de nuestros bolsillos esos papeles que no tenía ningún valor (nos quedaban al cambio 10€ a cada uno), nos metimos en un casino.
Consejos para perder 10€ (o mucho más) en un casino:
1. Procura que nadie hable tu idioma.
2. Pégate 4 días de fiesta previamente bebiendo para que lo poco que puedas llegar a entender no te ayude nada. Ni siquiera los gestos.
3. Entra al casino un lunes por la mañana, así te aseguras de que aunque ganes algo nunca sea mucho.
4. No haber jugado nunca a ningún juego de casino, ni entender las normas.
5. Busca una mesa dónde haya un asiático con cara de desfalcar casinos en las vegas (un japonés, un chino, un coreano...) y juega contra él.
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| Un asiático así, tipo éste, pero con traje también vale. |
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| ¡Y ya está! Ya lo has conseguido. |
Si sigues éstos pasos te aseguramos una mejora en el ritmo de pérdida de dinero, que no superará los 2 o 3 minutos independientemente de la cantidad.
El arco detector de metales es puramente ambiental, ya que todo el mundo pitaba pero nadie era registrado.
Es mucho más intenso jugar con gente armada.
Y los caramelos de la recepción están muy buenos. Hay de naranja, limón, cerezas y fresa.
Gracias al casino comprendimos que estábamos haciendo el primo, porque te dan consumiciones grátis y la entrada vale menos que una cocacola (4 euros).
A la vuelta, no nos sablaron tanto con el taxi porque ya habíamos aprendido.
Acabamos de gastar los restos de la moneda del país en un Burguer King y subimos los últimos al avión después de que nos llamaran por megafonía del aeropuerto y de que Javi tuviera que pagar por facturar su maleta, porque no colaba como equipaje de mano. Estuvimos a nada de quedarnos atrapados en el país.
Pero no nos sentimos para nada avergonzados, pues una familia de aquí de Sant Feliu de Llobregat la lió todavía más parda y creo que todavía estarán en el Burguer King.
Desde aquí quiero pedir una recogida de firmas en favor de la familia de Sant Feliu de Llobregat atrapada en Bucarest.
Podéis acceder a ella a través del enlace.
Y así fue como nuestros 4 héroes regresaron a sus hogares para vivir su resaca, tras cumplir una gesta alcoholica sin precedentes históricos disfrazada de viaje.
Debemos dar nuestro agradecimiento al pasillo del hotel, que nos permitió ver todos los lugares turísticos de Rumanía y obtener las mejores imágenes de ellos.
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| ¿Los candidatos del Partido Nacionalista Rumano o los malos de la nueva peli de James Bond? |
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